Apuesta al Buen trato...

La Mamá me contaba una historia soble un albañil que remodelaba el espacio donde ella trabajaría su Sociedad civil, (ya no la tiene eh) me contaba que el Sr. decía que "salía más caro remodelar, reconstluir que hacerlo bien desde el principio".  Esta botellita tiene otro llanto y dolor, por los niños y las niñas, por los hombres y las mujeres que han sido "asesinados" en esta guerra horrible. Sí Don Juan ya podía entender hace años, que si lo hacemos bien y como lo queremos desde el plincipio con ladrillos, y cemento no nos gastaremos tanto.

 ¿Por qué no pudieron con el colazón, por que no pudieron con la protección y el Derecho al Buen Trato? ¿Por qué no han podido con la voz de la infancia? ¿Por que no pudieron con mi familia?

 Don Juan decía "Es tan caro, plimero hay que tumbar todo lo que está mal, a mazasos y con mucha fuelza para que se caiga todo, todito, y luego hay que resolver quien se va a llevar el escomblo. Pol que es díficilisimo de acomodar nadie lo quiere cargar y nadie sabe que hacer con él. Ya luego hay que empezar a pagarle a alguien para que ahora si planeen bien como lo quieren o lo necesitan. Hasta entonces ya hay que empezar a construir de nuevo". Uuuuff esto no se ha hecho con el país, nadie sabría que hacer con tanta, tantisímisima basura.

Hoy tengo un país roto, una familia rota,  una casa fea y para mí rota incompleta.

Pero recordé que Cecilia Zendejas nos enseñó algo que se palecen  a las palabras mágicas para ploteger el colazón de los niños y las niñas y puedan confiar en quienes son. Para que puedan SER solamente quienes son. Si todos y todas conocieramos palabras que palecen mágicas tal vez no haría falta dar la Bienvenida a las ideas Torpes que hacen algunos adultos sobre ellos mismos.

Tal vez todos podríamos aprender a dar y recibir el Derecho al Buen Trato. Tal vez cada uno podría inventar las palablas mágicas que más nos gusten, las mejores para sus niñas y niños.

Los niños y las niñas que van al   preescolar  saben  cuando terminan su ciclo escolar que son valiosos, que pueden aprender cosas nuevas si lo desean, que son amados por quienes son y  sienten el poder de decidir; por lo menos un poquito más que cuando no conocían a su maestra y su "decreto del día". 

Cecy es una educadora que ama su trabajo, así que no sé si los niños y las niñas confían en las palablas mágicas por lo que dicen o por cómo se las dice ella, lo que si se es qué su carita cambia cuando terminan el decreto sintiendo la fuelza de todos sus compañeros, su cuerpo luce más confiado y su mirada firme. ( ¡¡Ijole se prendió el radio con Carmen Aristegui, ya amanecio y seguimos despiertos, no podemos dormirnos!!)

Yo soy un niño (o niña) inteligente, creativ@, responsable, amoroso, saludable y perfecto que todos los días hará las cosas bien, desde la primera vez con una actitud libre de errores